que la cúspide insigne de tu monte no será presa de la vil demanda
MIRANDA
Soneto
Gabriel Moquete
Artillería pesada se encamina
a invadir la ternura de tu encanto
pero otra vez el pueblo, con espanto,
detendrá toda acción vil y asesina.
Estate quieta mi gentil Miranda,
duerme tranquila sobre el horizonte
que la cúspide insigne de tu monte
no será presa de la vil demanda.
La artillería de rimas de poetas
te servirá de escudo, y no habrá grietas
en tu vientre de madre productora.
Tu arboleda, romántica y coqueta
seguirá retozando siempre inquieta
con los sublimes tintes de la aurora.